Todas las administraciones, disponen de una cartera importante de activos físicos como; inmuebles, de varias tipologías y uso, instalaciones deportivas, monumentos y otros.

Las administraciones están realizando importantes esfuerzos para implementar procesos que aporten transparencia a su gestión y, para ello es necesario disponer un marco conceptual que sea homogéneo, para facilitar las comparaciones entre activos similares y seguir las mejores prácticas de operación y, sirva para desarrollar e implementar la estrategia de gestión de los activos.

La estrategia de gestión de activos físicos, de gran tradición en los países anglosajones, en especial el gobierno australiano, quien, a finales de los años 90, se desarrolló y comenzó a implementar una estrategia innovadora en la gestión de sus activos físicos.

Con la publicación del conjunto de normas UNE ISO 55000, se establece un marco global para la gestión de activos, en general, y de los físicos en particular, los activos inmobiliarios que, en el caso de las Administraciones locales, a menudo tiene el estatus de protegido por su antigüedad y singularidad. La gestión de activos según la norma, se basa en cuatro pilares: Valor, Transparencia, Alineación y Liderazgo, que, serán desarrollados en la Jornada Técnica.

La implementación de un modelo, basado en la norma, permite el obtener beneficios de forma inmediata, aflorarán riesgos, oportunidades de mejora y otras que se deberán gestionar. En el área financiera, para cada activo que se incluya en el modelo, se alinearan el plan financiero del activo con los planes estratégicos de la administración que lo adopte y, permitirá mejorar los procesos de toma de decisiones, que se realizaran considerando el coste total en el ciclo de vida del activo; la gestión financiera y la función técnica quedaran integradas y se equilibran los riesgos. Todo ello, aporta transparencia a la gestión del patrimonio inmobiliario.